De acuerdo con los medios de Japón, el armador del barco desea que el gobierno de su país pida a las naciones implicadas que envíen la estructura a un lugar en el que puedan convertirlo en chatarra.
RCI tiene la información:
El propietario del barco japonés que derivó en el Pacífico hasta Canadá, después del tsunami hace un año, decidió no reclamarlo y abandonó sus derechos de propiedad.
Según los medios japoneses, el armador, que no fue indentificado, desea que el gobierno japonés pida a los países implicados que lo envíen al desguace como chatarra.
Una foto tomada por la aviación muestra al barco, oxidado pero intacto, a la deriva a unos 280 kilómetros de la costa sur de las islas Haida Gwaii, al norte de Vancouver y debería llegar a las costas canadienses dentro de unos 50 días.
Foto: Transports Canada