El gobierno federal parece haber tomado las medidas necesarias para calmar la presión que estaba recibiendo de la oposición en el Parlamento en relación a la guía de ciudadanía canadiense.
Esta semana Ottawa confirmó que la nueva versión del documento que sirve de referencia para que los inmigrantes estudien para su examen de ciudadanía incluirá una mención para alertar sobre la ilegalidad de la mutilación genital de mujeres.
El tema se había convertido en un punto de duros debates entre el gobierno liberal y los conservadores.
El ministro de Inmigración, Ahmed Hussen, confirmó a la cadena CBC que la nueva versión de la guía incluirá una mención a la “aborrecible práctica” de la mutilación genital femenina, la cual está en contra de las leyes canadienses.
“Si bien el contenido de la nueva guía todavía está siendo desarrollado, los canadienses pueden estar seguros que el nuevo documento incluirá información sobre las leyes de Canadá en contra de la violencia de género, incluida la FGM (abreviatura de la mutilación genital femenina, en inglés)”, señala el comunicado que reportó la cadena de información pública.
Un acalorado debate
El choque entre las fuerzas políticas en Ottawa surgió luego de un reporte que señalaba que la nueva versión de la guía de ciudadanía no tendría mención alguna a la ilegalidad de la mutilación genital femenina, una práctica que es común en ciertas comunidades de África, el Medio Oriente y Asia.
La vocera del Partido Conservador en materia de inmigración, Michelle Rempel, inició una campaña para revertir la decisión de los liberales, aunque estos últimos nunca admitieron la omisión directamente.
Durante un acalorado debate en la comisión parlamentaria, el ministro Hussen se limitó a decir que no podía hacer comentarios sobre una guía que no había sido escrita todavía.
La diputada Rempel lanzó una petición para exigir al Gobierno Federal incluir una mención sobre lo ilegal que es cualquier tipo de mutilación de los órganos femeninos de la mujer. Esta petición tiene hasta ahora más de 25.000 firmas.
Sin embargo, los conservadores quisieran un lenguaje incluso más duro hacia este tipo de prácticas, que han calificado como barbáricas.
FGM is a barbaric practice that involves the cutting and sewing of a young girl's external genitalia so that sexual intercourse becomes painful, and that she will face a lifetime of health complications including difficultly urinating, infections and complications in childbirth.
— Michelle Rempel Garner (@MichelleRempel) December 21, 2017
Según varios reportes, en Canadá todavía no se conoce de algún caso sobre mutilación genital femenina que haya llegado a los tribunales. Desde el año 1997 el Código Criminal fue modificado para que quede claro que este tipo de prácticas representan una agresión criminal.
Sin embargo, el diario Toronto Star señalaba en julio de 2017 que miles de niñas canadienses podían estar en peligro de ser sometidas a la mutilación genital, principalmente durante viajes fuera del país.
El Gobierno Federal no ha confirmado cuándo estará lista la nueva versión de la guía de ciudadanía canadiense.